Vivir y sentir colores, sabores y aromas embriagadores es fuente de placer. Saber preparar y cuidar cada detalle para alcanzar el desafiante equilibrio que domina la naturaleza pasional de un encuentro es un camino de sensaciones que fluyen hacia las infinitas formas lúdicas y luminosas del placer.
Desde los tiempos más remotos el hombre ha dedicado sus esfuerzos a propiciar la intimidad y el acercamiento con diversos recursos. Ya en el antiguo Egipto los aromas se han utilizado para mejorar el estado emocional o estimular la respuesta sexual. Velas, baños relajantes con sales o jabones especiales son la mejor manera de prepararse para una velada sugerente.
Una buena mesa a la hora de estimular los sentidos se torna indispensable.
Allí también la imaginación es un “ingrediente” fundamental, teniendo presente algunos secretos…
Formas, colores y sabores están asociados directamente al erotismo. A través de ellos sentiremos dinamismo, plenitud y energía como vehículos hacia el deleite.
Primer paso… elegir los ingredientes. Para esto época del año… Una sugerencia… Mandarinas estimulantes
Qué necesito:
2 kiwis.
2 mandarinas.
Zumo de medio limón.
2cdas de azúcar.
2cdas de agua.
4 hojas de menta.
Azúcar moreno.
El más importante: la energía y el amor al prepararlo, hará la diferencia.
Cómo lo hago?...
Separar los gajos luego de pelar las mandarinas, pelar los kiwis y trozarlos.
Colocar en una cacerolita el agua y el azúcar y cocinar a fuego medio hasta que se empiece a caramelizar.
Poner los gajos de mandarina lentamente y de uno en uno durante 30 segundos… retirarlos.
Ahora vamos a hacer una salsa fina:
Un poco de dulce: azúcar moreno.
Un poco de ácido: zumo de limón.
Un toque de menta.
Triturar con amor y obtenemos la salsa.
Ahora acostemos las mandarinas en su lecho… bañemos la fuente y pongamos las mandarinas. Decoremos con la menta y colocar en la heladera hasta el momento de servir.
Elijamos la persona indicada y compartamos en un lugar estimulante que invite a explorar y descubrir.
MENTA
Primera planta medicinal que fue utilizada como afrodisíaco por considerarlo un eficaz estimulante del sistema nervioso principalmente en la mujer.